Castilla y León es una de las regiones vitivinícolas más prestigiosas de España y hogar de algunas de las denominaciones de origen más reconocidas. Aunque todas estas zonas comparten una herencia cultural y geográfica común, cada una tiene su propia manera de llevar a cabo la vendimia, ese momento crucial del año en el que se recoge la uva que definirá la calidad del vino que degustaremos en celebraciones y reuniones. A continuación, vamos a explorar las características únicas y las curiosidades de la vendimia en algunas de las Denominaciones de Origen (DO) de Castilla y León, destacando sus particularidades y cómo éstas influyen en la elaboración de los vinos de nuestra tierra.
DOP Cebreros: La Vendimia más Temprana
Comenzamos nuestro recorrido en la DOP Vino de calidad de Cebreros, situada en la provincia de Ávila. Esta denominación es conocida por ser la primera en iniciar la vendimia en Castilla y León, habitualmente a mediados de agosto, aunque este 2024 se adelantó su comienzo al primer día de agosto. Cebreros se beneficia de un clima continental con veranos calurosos y secos, lo que acelera la maduración de las uvas, especialmente de la Garnacha, la variedad predominante en la zona.
El terruño de Cebreros, con sus suelos pobres en nutrientes y sus viñedos situados en pendientes pronunciadas, obliga a los viticultores a realizar una vendimia manual y selectiva. Esto permite recoger las uvas en su punto óptimo de maduración, asegurando la máxima calidad de los vinos que se producirán. Los vinos de Cebreros, tanto tintos como blancos, son conocidos por su frescura, acidez equilibrada y una notable expresión del terruño.
DO Rueda: Vendimia Mecánica y Nocturna
Nos trasladamos ahora a la DO Rueda, una denominación famosa por sus vinos blancos, especialmente los elaborados con la variedad Verdejo. En Rueda, la vendimia es un proceso intensivo y tecnológicamente avanzado, que se caracteriza por el uso de vendimiadoras mecánicas y la recolección nocturna.
La vendimia mecánica permite a las bodegas de Rueda recoger grandes cantidades de uva en un corto período de tiempo, lo cual es crucial para preservar la frescura y los aromas especiales7 de la Verdejo. La recolección se realiza en su mayoría durante la noche, cuando las temperaturas son más frescas. Esto ayuda a evitar la oxidación de las uvas y a mantener la acidez natural, clave para los vinos blancos frescos y afrutados que caracterizan a esta DO. El uso de técnicas modernas en la vendimia de Rueda es un ejemplo de cómo la tradición y la innovación pueden coexistir en la elaboración de vinos de calidad.
DO Arribes: Vendimia en Bancales
Siguiendo nuestro recorrido, llegamos a la DO Arribes, situada a lo largo de la frontera entre España y Portugal. Esta región, atravesada por el río Duero, se distingue por sus impresionantes paisajes de viñedos en bancales o terrazas, construidos en las empinadas laderas que descienden hacia el río.
La vendimia en Arribes es un auténtico desafío debido a la dificultad de acceso a los viñedos. La recolección de uvas en estos bancales es un proceso manual que requiere un gran esfuerzo físico y una cuidadosa planificación, una dedicación que se ve recompensada en la calidad de los vinos, que presentan una notable complejidad y un carácter único, reflejo del duro terruño de Arribes.
DO Ribera del Duero: Control de Calidad Estricto
No podemos hablar de las vendimias en Castilla y León sin mencionar la DO Ribera del Duero, una denominación famosa por sus vinos tintos, elaborados principalmente con la uva Tinta del País, variedad local de Tempranillo. La vendimia en Ribera del Duero es un proceso altamente controlado, donde la calidad es la prioridad absoluta.
Muchos de los viñedos de Ribera del Duero están situados a altitudes que oscilan entre los 700 y 1.000 metros sobre el nivel del mar. Esta altitud, combinada con las marcadas diferencias de temperatura entre el día y la noche, contribuye a una maduración lenta y equilibrada de las uvas. La vendimia suele comenzar en septiembre y se extiende hasta octubre, con una combinación de recolección manual y mecanizada, dependiendo de la parcela y de la calidad de las uvas.
Una vez en la bodega, las uvas pasan por una estricta selección en mesa, donde se descartan aquellos racimos que no cumplen con los estándares de calidad exigidos. Este proceso minucioso asegura que solo las mejores uvas se utilicen para la elaboración de los vinos, que destacan por su estructura, complejidad y capacidad de envejecimiento.
DO Toro: Alta Concentración y Vendimia Rápida
La DO Toro, en la provincia de Zamora, es conocida por sus vinos tintos potentes y concentrados, elaborados principalmente con la variedad Tinta de Toro, una adaptación local del Tempranillo. El clima cálido y seco de Toro provoca una rápida maduración de las uvas, lo que obliga a los viticultores a estar atentos para realizar una vendimia rápida y precisa.
En Toro, la vendimia se lleva a cabo tanto de manera manual como mecanizada. En viñedos más jóvenes o menos accesibles, se utiliza maquinaria para recoger las uvas rápidamente, mientras que en viñedos de mayor calidad, la vendimia manual permite una selección cuidadosa de los mejores racimos. La clave en Toro es encontrar el equilibrio entre la alta concentración de azúcares y taninos, que da lugar a vinos robustos y de gran cuerpo, y la preservación de una buena acidez, que aporta frescura y longevidad a los vinos.
DO Bierzo: Vendimia Escalonada en Terrenos Escarpados
Por último, visitamos la DO Bierzo, situada en la provincia de León. Esta denominación se caracteriza por la producción de vinos tintos elegantes, elaborados principalmente con la uva Mencía, cuya vendimia es una tarea ardua debido a la orografía de la zona, con viñedos situados en laderas empinadas.
En Bierzo, la vendimia suele ser manual y se realiza de manera escalonada, recogiendo las uvas en diferentes momentos según la altitud y la orientación de las parcelas. Esto permite a los viticultores cosechar las uvas en su punto óptimo de maduración, lo que es crucial para preservar la frescura y la acidez natural de la Mencía. La vendimia en Bierzo es un claro ejemplo de cómo la adaptación al terreno y al clima puede resultar en vinos de una elegancia y sutileza excepcionales.
Cada Denominación de Origen en Castilla y León tiene su propia manera de llevar a cabo la vendimia, adaptándose a las condiciones geográficas, climáticas y varietales de cada zona. Desde la vendimia temprana en Cebreros hasta la recolección nocturna en Rueda, la diversidad de métodos refleja la riqueza y complejidad de nuestro panorama vitivinícola.
Estas vendimias únicas no solo son un testimonio del arduo trabajo y la dedicación de los viticultores, sino que también contribuyen a la creación de vinos que capturan la esencia de su terruño, ofreciendo al mundo una variedad de sabores y estilos que hacen de Castilla y León un referente en la producción de vinos de calidad.