La nuestra es una tierra llena de sabor en todos los sentidos. Nos gusta comer, sí, pero sabemos a ciencia cierta que nuestros deliciosos manjares siempre deben ir acompañados de grandes vinos que mariden con ellos a la perfección, creando en nuestro paladar una dimensión de placer superior, ¿verdad?

Por eso, somos una de las regiones productoras más reconocidas por la calidad de sus vinos, elaborados por 14 figuras de calidad vínicas, 13 Denominaciones de Origen y la Indicación Geográfica Protegida Vino de la Tierra de Castilla y León, nuestra gran protagonista de hoy. ¡Nos encantaría que nos acompañaras a conocer más sobre ella!

Lo primero que debes saber es que la gran transformación de los viñedos de Castilla y León llegó entre finales del siglo XX y principios del XXI, cuando estos se empezaron a concentrar en zonas con las mejores condiciones para conseguir la máxima calidad de la uva, creando así múltiples figuras de calidad vínica.

La figura de calidad vínica más heterogénea

Esta I.G.P., creada en el año 2000, es la más heterogénea de Castilla y León, ya que su área delimitada abarca toda la región y los vinos que se incluyen dentro de ella pueden ser blancos jóvenes, rosados, tintos, espumosos, vinos de aguja, de licor y de uva sobremadura.

Como ya sabes, el inicio de todo vino se encuentra en la uva, un fruto tan popular y diverso en nuestra tierra que, una vez embotellado, regala a quien lo degusta increíbles y diferentes experiencias sensoriales.

Vino de la Tierra de Castilla y León

Todas las variedades de uvas empleadas son de un sabor y de una calidad infinita, siendo la Mencía, la Prieto Picudo, la Tempranillo, la Merlot o la Garnacha tinta, roja o tintorera algunas de las más utilizadas para elaborar inolvidables tintos y deliciosos rosados. Si tu paladar es más de vino blanco, debes saber que entre las uvas más utilizadas para elaborarlo destacan la Albillo, la Malvasía, la Verdejo, la Godello, la Sauvignon Blanc o la Chardonnay.

Vinos de la Tierra… unos vinos especiales

¿Te preguntas qué más hace que los Vinos de la Tierra sean tan especiales? ¡Tenemos la respuesta! El clima de Castilla y León, que se mueve entre el continental y el mediterráneo, su localización en el interior de la península, su altitud (¡más del 98% del territorio está por encima de los 600 metros!) y la protección de las montañas son agentes esenciales que influyen en las características del fruto y de los vinos elaborados a partir de él.

Vino de la Tierra de Castilla y León

No podemos olvidarnos del factor humano, indispensable para convertir a Castilla y León en una de las zonas vitivinícolas más afamadas gracias al trabajo de sus campesinos que, durante siglos, han dado con los cultivos que mejor se adaptasen a las duras condiciones climáticas de nuestra tierra.

Todos y cada uno de los Vinos de la Tierra de Castilla y León son una maravilla que convertirá tus mejores momentos en una auténtica delicia. ¡Por suerte, en el Market de Tierra de Sabor puedes comprar algunos de ellos en un solo clic y sin gastos de envío!